El Parlamento convalida el decreto ley del Gobierno que aplica el tipo 0 del IGIC a todas las mascarillas

El Parlamento de Canarias convalidó este jueves dos decretos leyes aprobados por el Gobierno del pasado noviembre sobre la fiscalidad de material sanitario para combatir el Covid-19, se indica en una nota de prensa de la Consejería de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos del Gabinete regional. El primero de ellos, señala, para prorrogar la vigencia del artículo único del Decreto ley 8/2020, de 23 de abril, de establecimiento del tipo cero en el IGIC (Impuesto General Indirecto Canario) aplicable a la importación o entrega de determinados bienes necesarios para combatir los efectos del Covid-19, y el segundo para fijar el tipo cero en el mismo impuesto a la importación o entrega de todos los tipos de mascarillas y productos sanitarios para diagnóstico in vitro del Covid-19. 

El vicepresidente  del Gobierno de Canarias, Román Rodríguez, explicó que la prórroga del primero será hasta el 30 de abril y el de las mascarillas de venta al público estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2021, “aunque esperamos que de aquí a allá no sea necesario seguir con ellas”, dijo. 

En cualquier caso, Rodríguez insistió en la necesidad de no bajar la guardia y de que la ciudadanía respete al máximo las normas aprobadas por el Gobierno para combatir la pandemia especialmente durante las celebraciones navideñas. 

En relación a la convalidación aprobada por el Parlamento, se apunta en la nota, hay que recordar que el Gobierno de Canarias modificó el pasado 12 de noviembre un decreto ley para establecer con carácter general el tipo 0% del Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) para las mascarillas de venta al público. De esa manera, las mascarillas tendrían idéntica consideración fiscal de la que tiene el material destinado a entidades de derecho público, clínicas o centros hospitalarios, e incluso entidades o establecimientos privados de carácter social. 

El objetivo final de la fijación del tipo impositivo 0 es que se reduzca el precio de elementos sanitarios vitales para luchar contra la expansión de la pandemia y, en el caso concreto de las mascarillas, mantener el diferencial fiscal con el resto del Estado, después de la decisión del Gobierno de rebajar el IVA al 4%, concluye.